DESDE EL
IMPERIO TURCO: PALESTINOS Y SEFARADÍES
El período que comprende los años 1880 a 1930, son los más importantes en cuanto a la emigración de sefardíes desde el Imperio Turco a nuestro país. Es este componente migratorio, el creador y generador
de las instituciones y de la vida judía sefaradí como colectividad tal como la conocemos
hoy en día. Es a partir de aquí, donde podemos establecer tres parámetros de
sefardíes
bien definidos, los primeros llegados directamente de Sefarad, siguiendo el movimiento
energético expansionista del Imperio Español, componente en su gran mayoría de Marranos
y Conversos, establecidos y absorbidos en la población chilena. |
Así como en la España del siglo XII al siglo XIV, en el conflicto cristiano - árabe, los judíos quedaron atrapados en una vórtice de la que era muy difícil salir, en esta nueva etapa de la historia sefaradí, nuestra gente quedó entre dos mundos irreconciliables. Nuevamente la situación se repetía, sólo que esta vez no tenía la opción de la conversión, sino que debía aceptar convivir con los pueblos liberados, retroceder y luchar junto a los otomanos o emigrar. Emigrar palabra muy familiar para los judíos de cualquier parte del mundo, ¿pero a qué lugar huir?, la respuesta generaría a partir de la lengua conservada durante siglos, ese idioma arcaico pero querido y conservado como un tesoro antiguo, el ladino o djudezmo, que más lógico que volver la vista y los pasos a las naciones que hablaban la lengua de los ancestros. España aún mantenía sus decretos de expulsión y prohibición vigentes, pero estaban las otras naciones nacidas a partir de la ingrata Sefarad, donde se contaban historias poco conocidas de marranos y conversos, además estos países no practicaban la aversión al judaísmo, a pesar de ser absolutamente católicos, por lo tanto la nueva tierra sería LATINOAMERICA. |